La reanimación cardiopulmonar (RCP) y el uso del desfibrilador externo automático (DEA) siguen siendo piezas clave para prevenir la muerte súbita. Las guías de la American Heart Association han sido recientemente actualizadas en 2025, incorporando los últimos avances científicos para mejorar las probabilidades de supervivencia. En esta nota te contamos lo esencial.
1. ¿Por qué se actualizan las guías?
Las guías de RCP y Atención Cardiovascular de Emergencia (ECC) se revisan periódicamente para incorporar nueva evidencia científica, tecnologías emergentes y mejores prácticas que aumenten la tasa de recuperación tras un paro cardíaco.
2. Cinco puntos clave de la versión 2025
- Mayor énfasis en la calidad de las compresiones: profundidad, ritmo y minimizar interrupciones siguen siendo críticos.
- Capacitación y movilización comunitaria reforzadas: incluir más entrenamientos dirigidos a no profesionales de la salud, escuelas e instituciones inmersas en la comunidad.
- Integración de tecnología y feedback: los dispositivos con sensores que miden calidad de reanimación y los DEA deben estar disponibles más ampliamente.
- Actualización de algoritmos y enseñanza: nuevos materiales educativos, cursos basados en simulaciones realistas y entrenamiento más frecuente.
- Enfoque en sistemas integrados de atención: optimización de la cadena de supervivencia —detección, activación del Sistema de Emergencias, RCP temprana, desfibrilación temprana, atención post-paro— para aumentar las probabilidades de supervivencia.
3. Qué significa para vos o tu institución
- Saber RCP ya no es “un valor agregado”, es una necesidad para cualquier persona o comunidad que quiera estar preparada ante una emergencia.
- Tener un DEA accesible y conocer su uso mejora significativamente las probabilidades de recuperación ante un paro.
- Las actualizaciones confirman: cada segundo cuenta, y la mejor RCP es la que empieza antes de que lleguen los servicios de emergencia.
- Instituciones, escuelas y empresas tienen un papel fundamental al capacitar, preparar protocolos y disponer de equipos.
4. ¿Qué podés hacer ahora?
- Verificá si tu institución tiene un DEA y si está al día y listo para ser utilizado.
- Programá una capacitación de RCP/DEA para tu equipo o comunidad.
- Realizá entrenamientos periódicos, una vez por año sería lo ideal.
- Difundí en tu entorno que la respuesta rápida y coordinada puede marcar la diferencia.
Conclusión
Las nuevas guías 2025 de la American Heart Association refuerzan lo que ya sabíamos: la prevención y la acción temprana salvan vidas. En FUPREMUS seguimos impulsando que cada persona, institución y comunidad esté preparada.
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