(10 de octubre — Día Internacional del Huevo)
El huevo es un alimento presente en la mayoría de las cocinas del mundo: barato, versátil y muy nutritivo. Pero cuando hablamos de salud cardíaca muchos todavía se preguntan: ¿es seguro comer huevos? ¿Afectan al colesterol y al riesgo de sufrir un paro cardíaco inesperado? En esta nota te lo explicamos en detalle, con la evidencia científica más reciente.
Durante años, el huevo fue injustamente señalado como “enemigo del corazón” por su contenido en colesterol. Sin embargo, las investigaciones más recientes demostraron lo contrario: consumir huevos con regularidad no solo no aumenta el riesgo cardiovascular, sino que puede contribuir a reducirlo.

Lo que dice la ciencia
Dos grandes estudios publicados en revistas de alto impacto —The British Medical Journal y The American Journal of Medicine— analizaron a cientos de miles de personas y encontraron resultados muy claros:
El consumo habitual de huevos no se asocia a mayor riesgo de enfermedad cardiovascular ni de muerte por causas cardíacas.
Incluso, puede tener un efecto protector, especialmente cuando el huevo forma parte de una alimentación equilibrada.
Estos hallazgos desmontan el viejo mito de los años 70, cuando se recomendaba no comer más de tres huevos por semana. Hoy, tanto la OMS como las Guías Alimentarias para la Población Argentina (GAPA) reconocen que el colesterol dietario tiene poca influencia sobre el colesterol sanguíneo.
En la mayoría de las personas, el colesterol total y el LDL (“colesterol malo”) están mucho más determinados por la genética, el sobrepeso, el sedentarismo y la calidad general de la dieta que por el consumo puntual de alimentos como el huevo.
Un aliado para la salud cardiovascular
El huevo es un alimento saludable, biodisponible y cardioprotector.
Su composición lo convierte en una opción ideal dentro de una dieta para cuidar el corazón:
- Proteínas de alto valor biológico, con todos los aminoácidos esenciales.
- Grasas mayormente monoinsaturadas, las mismas que encontramos en el aceite de oliva y el palta.
- Vitaminas del complejo B (como la colina y la biotina), que intervienen en el metabolismo celular y el buen funcionamiento del sistema nervioso.
- Luteína y zeaxantina, antioxidantes que protegen la vista y reducen la inflamación.
- Alta saciedad: ayuda a controlar el apetito y mantener un peso saludable.
- Sustentable y accesible: su producción requiere menos recursos ambientales que muchas fuentes de proteína animal.
Por su perfil nutricional, hoy se recomienda consumir hasta 1 huevo por día, siempre dentro de una dieta equilibrada y con un estilo de vida activo.
En Argentina, cada vez más presentes en la mesa
El consumo de huevos en nuestro país viene creciendo año tras año.
Según la Cámara Argentina de Productores e Industrializadores Avícolas (CAPIA), en 2025 el promedio nacional alcanzó 385 unidades por persona al año.
Este aumento refleja un cambio positivo: más personas eligen incorporar este alimento completo, económico y versátil, que además se adapta a múltiples preparaciones saludables.

Cuidar el corazón empieza en los hábitos
La prevención de la muerte súbita y las enfermedades cardiovasculares no depende de un solo alimento, sino de una combinación de factores: una alimentación equilibrada, ejercicio regular, control de la presión y el colesterol, manejo del estrés y chequeos médicos periódicos.
Dentro de ese contexto, el huevo puede ocupar un lugar destacado como parte de una dieta cardioprotectora, ayudando a mejorar la calidad nutricional general sin aumentar el riesgo.
En resumen
- Comer huevos no aumenta el riesgo cardíaco.
- Podés consumir hasta uno por día, dentro de una alimentación saludable.
- El huevo aporta nutrientes esenciales y puede formar parte de una estrategia de prevención cardiovascular.
- Consultá siempre a tu médico o nutricionista si tenés antecedentes cardíacos o factores de riesgo específicos.
Lic. en Nutrición Paula Mizrahi
MN 7071.
Ig @mejorandopautasdevida